| CEO de la División de Agua y Energía de Abengoa “Abengoa tiene un reconocido prestigio en un gran abanico de tecnologías”
ABENGOA ADAPTA SU ACTIVIDAD A LA SITUACIÓN CREADA POR EL COVID-19, DESEANDO EL BIENESTAR DE LAS PERSONAS Y TOMANDO TODAS LAS MEDIDAS NECESARIAS EN FUNCIÓN DE LAS INSTRUCCIONES Y RECOMENDACIONES DICTADAS POR LAS AUTORIDADES EN CADA PAÍS.
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D. Pedro Almagro --
Lleva muchos años vinculado a la compañía. ¿Cómo ha sido su evolución en los servicios de Agua y Energía?
Desde que me incorporé a Abengoa en 1998, he sido testigo de la importante evolución que ha experimentado el negocio de Agua y Energía en Abengoa, adaptándose a las necesidades de la sociedad y a los cambios que éstas han ido produciendo en el mercado.
Mi carrera en Abengoa comenzó mayormente ligada al mundo del agua y el medio ambiente. En mis primeros años en la compañía, estando a cargo del departamento de Ofertas Internacionales de la división de Agua, tuve la oportunidad de participar en importantes proyectos que sentaron las bases de nuestro crecimiento actual en dicho sector. Proyectos de desalación en Argelia, India y muy especialmente en China, donde ocupé desde 2007 el puesto de director general en este país, periodo en el que desarrollamos la desaladora de Qingdao cuya construcción finalizó con éxito en 2013. Tras este periodo, ya como director de la División de agua de Abengoa en Estados Unidos, pude continuar siendo parte de proyectos pioneros en el sector, como Vista Ridge, que asegura el futuro suministro estable de agua a la ciudad de San Antonio, Texas.
Desde 2016, tras mi etapa en Estados Unidos, la compañía me ha permitido el honor de liderar el negocio de agua en un periodo en el que, a pesar de las dificultades, hemos conseguido mejorar notablemente nuestra posición en el mercado, siendo en 2019 la compañía con mayor contratación en desalación en el mundo, lo que nos permite tener a día de hoy una cartera con proyectos muy interesantes y los más grandes de su tipología a nivel mundial, lo que nos anima a continuar haciendo todos los esfuerzos para mantenernos en esta línea de crecimiento.
Desde enero de 2019 tengo, además, la oportunidad de participar también en el negocio de la generación de energía. Un reto apasionante y un gran orgullo, pues gracias al fabuloso trabajo que se ha hecho en el pasado y se continúa haciendo a día de hoy, Abengoa tiene un reconocido prestigio en un gran abanico de tecnologías, en las que nuestros equipos tienen amplia experiencia y profundo conocimiento. Esto nos diferencia de gran parte de la competencia y es el valor con el que conseguimos convencer y fidelizar a nuestros clientes.
¿Cuáles son las principales actividades del área que dirige?
En Abengoa Agua y Energía, gestionamos los sectores que son los pilares fundamentales del negocio de la compañía. Por un lado, en lo que respecta a agua, somos un referente internacional en la construcción de plantas desaladoras, infraestructuras hidráulicas, plantas de tratamiento de aguas, potabilización, etc. Y por otro, en cuanto al área de energía, construimos plantas de generación eléctrica con tecnologías de energía convencional y renovable.
Han ido creciendo en el sector industrial, tanto en el diseño y la construcción como en la operación y mantenimiento. ¿Cuáles son las claves de su éxito?
La clave de este éxito ha sido el buen trabajo y la perseverancia del equipo. En Abengoa, tenemos grandes profesionales que, a sus conocimientos y experiencia, suman el tener las ideas muy claras: vocación de satisfacción al cliente como la mejor vía para contribuir a alcanzar los objetivos globales de la compañía. Sin duda, nuestra gente es el mayor activo de Abengoa. Por otro lado, contamos con dilatada experiencia tanto en EPC como también en O&M, lo que nos permite disponer de una cartera de, aproximadamente, 980 millones de euros en Agua y Energía.
En Energía, contamos con 9,3 GW de potencia instalada en plantas de generación convencional, de los que 1,4 GW están en construcción; así como otros 2,1 GW contratados en energía solar, de ellos 860 MW aún en construcción, habiendo ejecutado el resto; y 480 MW de energía eólica. En el sector del Agua, disponemos de más de 1,7 millones de m3/día de capacidad instalada de desalación y 2 millones de m3/día enconstrucción. En potabilización de agua, tenemos una capacidad de producción global de más de 2,2 M m3/día de agua potable y hemos construido plantas que depuran más de 1,5 millones m3/d de aguas residuales. En proyectos hidráulicos, hemos realizado proyectos para la implantación, mejora y explotación de infraestructuras de regulación, transporte (más de 40 estaciones de bombeo y más de 1.100 km de grandes conducciones), distribución (más de cuatro millones de población servida), regadío (más de 500.000 ha) y centrales hidroeléctricas (más de 400 MW instalados en más de 40 actuaciones de construcción de plantas, mejora y modernización).
La compañía tiene una amplia experiencia en la hibridación de plantas que proporcionan energía limpia. De hecho, disponen de una herramienta propia de modelado. ¿En qué consiste esta nueva tecnología?
Es cierto que nuestra herramienta de modelado y optimización, Abengoa Energy Management System (AEMS), nos ha permitido definir la solución óptima a nuestros clientes basada en nuestra experiencia a lo largo del amplio rango de tecnologías que desarrollamos.
La hibridación consiste básicamente en la combinación de diferentes tecnologías que se pueden complementar con el objetivo de dar la mejor respuesta posible a las necesidades actuales de descarbonización y contribuir así a la lucha contra el cambio climático.
Abengoa ha sido pionera en soluciones de este tipo. En concreto, lleva años trabajando en ciertas tecnologías de energía limpia, llegando incluso a desarrollar tecnología termosolar propia, así como soluciones de almacenamiento térmico, áreas en las que podemos decir que es líder mundial al haber construido el 34% de las plantas termosolares en operación en todo el mundo. Abengoa, de hecho, también fue la primera compañía en hibridar energía solar y gas en una planta comercial (Ain Beni Mathar), que funciona con éxito desde 2011 en Marruecos.
Además de esto, la experiencia de la compañía en diferentes tecnologías (solar, eólica, baterías, motores, biomasa, cogeneración, agua) le permite diseñar y optimizar la mejor solución para los requisitos específicos de su cliente y desarrollar esta oferta en un solo EPC, contrato llave en mano, brindando todas las garantías necesarias.
Nuestra experiencia ahora ha progresado de la generación convencional a las energías renovables y a tecnologías de descarbonización de siguiente generación, como pilas de combustible e hidrógeno verde producido a partir de energías renovables. También ha desarrollado su propia tecnología de calor de proceso solar industrial para procesos industriales pesados de alta temperatura, adaptada a las necesidades de sectores estratégicos que requieren tecnologías de descarbonización fiables.
Son punteros en el mercado solar. ¿Qué proyecto destacaría?
Es difícil para mí elegir uno de nuestros proyectos, ya que estamos colaborando en importantes referencias que han supuesto hitos relevantes en el sector. Eso sin contar con que, en el pasado, hemos construido y desarrollado proyectos históricos de referencia, como las plantas termosolares de torre PS10 y PS20 en Sevilla; o el primer y único proyecto de este tipo en África, Khi Solar One, en Sudáfrica, donde también hemos construidos otras dos plantas CSP de colectores cilindroparabólicos, una de las cuáles está batiendo récords actualmente: Xina Solar One.
Siguiendo con el presente, estamos construyendo en Chile, en consorcio con Acciona para EIG Global Energy Partners, la que será la primera planta termosolar de torre Latinoamérica. Ubicada en el desierto de Atacama, tendrá una capacidad de 110 MW y, junto con la planta fotovoltaica de 100 MW que Abengoa construyó en solitario, forman juntas un complejo de energías renovables con una capacidad total de 210 MW y el primero que combina ambas tecnologías en todo el continente.
Por otro lado, Abengoa está participando en la construcción del complejo solar más grande del mundo en Dubai, el Mohammed bin Rashid Al Maktoum Solar Park, propiedad de la DEWA (Dubai Electricity and Water Authority), con la construcción de un campo solar de colectores cilindroparabólicos de 3 x 200 MW con 12 horas de almacenamiento en sales fundidas. Este complejo será clave para convertir Dubai en el epicentro internacional de la energía limpia y la economía sostenible.
No podemos olvidar, además, que Abengoa está participando actualmente en la construcción de la mayor planta híbrida solar gas del mundo, Waad Al-Shamal, en Arabia Saudí, que contará con un ciclo combinado solar-gas de 1.390 MW con un campo solar de colectores cilindroparabólicos de 50 MW.
En el ámbito de la desalación, permítame felicitarle por el premio recibido de la Asociación Internacional de Desalación (IDA).
Para nosotros ha sido un honor recibir este reconocimiento. Como he dicho anteriormente, todo esto no hubiera sido posible sin el duro trabajo y la experiencia de nuestro equipo. Esto no ha llevado a colocarnos a la cabeza de los principales contratistas en desalación.
En concreto, este premio al Best Public-Private Partnership (mejor asociación público-privada) lo recibimos en el marco del proyecto de desalación que Abengoa está desarrollando en Agadir, Marruecos. Se trata de un proyecto único para dos clientes: la ONEE (Office National de l’Electricité et de l’Eau Potable) y el Ministerio de Agricultura, Pesca Marítima, Desarrollo Rural y de Aguas y Bosques de Marruecos, que nace a partir de la mutualización de dos proyectos y gracias al que se va a construir una gran desaladora con una capacidad total de producción de 275.000 m3 de agua desalada al día, que será la mayor planta diseñada y concebida para uso combinado de agua potable y regadío.
Por otra parte, el pasado mes de febrero participó en un Desayuno de trabajo sobre “Retos en la gestión global de EPC”. Como miembros de ADEMI, ¿qué les reporta pertenecer a la Asociación?
La pertenencia a esta Asociación nos da la oportunidad de compartir experiencias con importantes actores en el sector. Esto conlleva unos beneficios intangibles que valoramos muy positivamente. Nos proporciona un punto de encuentro y de intercambio de conocimientos que nos aportan valor.