| El pasado 30 de septiembre, la empresa española Isotron, del grupo Isastur, entregó la fase inicial de la primera planta solar construida en Bolivia, situada en la región amazónica de Pando.
La planta generará inicialmente 1,7 MW, según explicó el presidente de Bolivia, Evo Morales, en un discurso en la capital pandina, Cobija, donde acudió para inspeccionar la obra.
La planta contará con 17.334 paneles solares en un área de 11 hectáreas y se construye con una inversión de 11,8 millones de dólares.
Según la estatal Empresa Nacional de Electricidad (ENDE), que encargó la obra a Isastur, se trata de una instalación con características que la hacen única en el mundo porque la generación funcionará con paneles solares y también con diésel.
Cobija, una ciudad fronteriza con Brasil, tiene un sistema de generación eléctrica aislado, al no estar conectado con la red nacional, y produce fundamentalmente su energía con diésel.
Esa ciudad, y las poblaciones cercanas de Puerto Rico y Porvenir, tienen una demanda de 9 MW, por lo que los nuevos 5 MW de la planta solar permitirán cubrir más del 50% de los requerimientos y atender las nuevas demandas.
Con la planta fotovoltaica, se dejará de consumir 20 millones de litros de diésel, lo que supondrá un ahorro de tres millones de dólares para el Estado boliviano, que importa ese combustible.
Este es el primer trabajo de la filial de Isastur en Bolivia, donde otras empresas españolas de ingeniería están construyendo obras para el Estado boliviano en el sector petrolero.
Evo Morales tomó parte en el acto de entrega de la primera fase de estas instalaciones fotovoltaicas, quien aseguró que el Estado hará nuevas y mayores inversiones para impulsar el desarrollo del departamento de Pando. Morales declaró que "cuando yo hablo de que Bolivia va ser el centro energético de Sudamérica, no lo digo para ganar votos, y no debe ser solamente una política del Gobierno, sino debe ser una política de Estado. Vamos a convertir a Bolivia en el centro energético de Sudamérica, lo que significa que vamos a exportar energía aprovechando el sistema solar". Además, el presidente agradeció el trabajo realizado por Isotron, que contó para las obras con una plantilla en la que la práctica totalidad de sus integrantes fueron bolivianos.
En representación del Grupo Isastur, José Acuña, declaró que "estamos muy contentos por el rendimiento del personal local, la gente se vio muy comprometida con el proyecto y con muchas ganas de tener esta obra", que mejorará sus condiciones de vida. El cambio constante del clima fue el gran impedimento para el traslado del material de construcción. "Nos encontramos con lluvias y con 60 camiones de gran tonelaje circulando por las carreteras, y el paso de los ríos fue un impedimento para transportarnos", pese a lo que los trabajos avanzaron con rapidez y precisión, añadió Acuña.
La primera fase, ya concluida y ahora en funcionamiento, genera una potencia de 1,7 MW. La segunda fase incorporará 3,3 MW de potencia, para completar los cinco que, se prevé, entren en un funcionamiento total desde diciembre próximo. |